Domingo, 14 Diciembre 2025
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El famoso precinto de una piedra en Stratvs por la Agencia de Proteción del Medio Ambiente, del Gobierno de Canarias, ha despertado bastante incredulidad entre la ciudadanía y cierto malestar en el sector vitivinícola de la isla. El propio director de esa Agencia de Protección, el señor Coello, que visitó la isla para la firmas de unos convenio, justificó la actuación de la Agencia porque había recibido una denuncia de que se estaba construyendo una cueva sin permiso en un espacio protegido. “Nadie nos dijo que se trataba de una cuevita de un portal de Belén”, señaló algo contrariado. Más allá de que el señor Coello tenga que defender a sus funcionarios, el fondo de la cuestión de este asunto que roza el ridículo, es por qué hay una persecución sistemática contra esa bodega propiedad del conocido empresario Juan Francisco Rosa. El portal de belén canario que se puso en las inmediaciones de la bodega en las pasadas navidades no hizo sino favorecer al sector vitivinícola. Se creó una actración para los turistas que seguro que agradecieron el detalle de la Bodega Stratvs. Al poco de terminar las navidades el portal se desmontó y los 30 metros cuadrados que ocupó regresaron a su estado natural.

 

Algo positivo. Lo que tenía que haber sido una noticia positiva se convirtió por mor de la estupidez en algo negativo que seguramente obligue al empresario a no realizar el esfuerzo económico que supuso su montaje en bien del interés de la zona. La burocratización a la que está llegando Canarias y sus espacios protegidos está alcanzado cotas inaguantables. El otro día nos enteramos que una finca en La Geria abandonada propiedad del empresario y promotor turístico Domingo Rodríguez y que realizaba trabajo de recuperación fue también paralizada por Medio Ambiente ¿Va estas actuaciones en favor de la zona? ¿Anima a los propietarios de fincas a seguir mejorando La Geria? Los políticos deben tomar cartas en el asunto, no debe permitir que el exceso de celo de los funcionarios y a veces la persecución pura y dura contra algunos de los empresarios de esta isla se conviertan en moneda de cambio. El dato está claro, de las 3000 hectáreas de cultivo de vid se ha perdido más de una tercera parte de ellas. Realmente creen los responsables públicos que así se recupera La Geria. Si realmente quieren salvar La Geria, como predican, dejen que los que la mantienen, que no son otros que las bodegas y los propietarios de fincas, se sientan protegidos y nos perseguidos.

 

LEA EL RESTO DE LOS TRASMALLOS EN EL SEMANARIO LANCELOT


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