OPINIÓN. El PC y el PH
LA CHINA EN EL ZAPATO. Por José Ignacio Sánchez Rubio, abogado y economista
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Con ese título, pretendo redenominar a dos partidos políticos de nuestro mal llamado Reino de España (a decir de Don Antonio Coll). Estos dos partidos, son el Partido Cigarra y el Partido Hormiga con sus correspondientes seguidores a los que denomino, si ustedes me lo permiten, cigarreros y hormigueros, respectivamente.
Porque es increíble que, dos mil y pico años después del nacimiento de Jesucristo, siga vigente y de actualidad aquella fábula que glosó Esopo quinientos y pico años antes.
Y para los mas jóvenes, aturdidos seguramente por el desamparo educativo en que los tiene sumida la LOE (Ley Orgánica de Educación), les añadiré que Esopo fue un fabulista griego que nació, mas o menos, 600 años antes que Jesús de Nazaret. Y para los que, además, no sepan lo que es una fábula (que más de uno habrá), les informo que es una composición poética, de longitud diversa, que glosa una situación ficticia, de la que se extrae un corolario (evidencia, para las víctimas de la LOE). Por aquí, lo despachamos mas rápidamente con nuestro amplio refranero.
Pues como bien saben Uds., el fabulista griego relató, en esencia, la vida durante el verano de una cigarra y de una hormiga, a través de un dialogo entre ellas. En la fábula, la cigarra que dedicó todo el verano a sestear, se vio en la tesitura de tener que pedir a la laboriosa hormiga algo de alimento para pasar el invierno porque, entretenida como estuvo todo el verano en sestear y cantar, al llegar el invierno nada tenía para comer.
Pues si traigo hoy a colación esta tontería, es porque anoche miércoles 2 de noviembre de 2.011, me quedé impresionado con los datos que se transmitían por el telediario de una televisión hormiguera.
Resulta que, según los datos contrastados por las auditorías, el Ayuntamiento de Alcorcón (Madrid), que ha estado gobernado por el Partido Cigarra unos cuantos años, ha acumulado una deuda pendiente de pago de mas de 600 millones de Euros (para los de la LOE, mas de CIEN MIL MILLONES de pesetas). Por cierto, que en contra de lo que muchos creen, las pesetas siguen vigentes, aunque no sirven como moneda de pago (pero esperen, que todo se andará).
Y rebuscando en mis notas, resulta que Alcorcón es un municipio, con una población de alrededor de 200.000 habitantes. Y si el aprobado que me dieron en matemáticas no fue inmerecido, cada alcorcoreño tendrá que pagar medio millón de pesetas, dado que el Ayuntamiento no tiene un solo euro.
¿Y como puede ser esto?, me pregunté yo al escuchar la noticia. Como si hubiera escuchado mis pensamientos, la guapísima locutora me lo aclaró, con dos botones de muestra: El alcalde (del partido cigarrero), había decidido hace un par de años construir una escuela de circo, en la que se ha gastado mas de ciento sesenta millones de euros y, en las últimas fiestas navideñas, a pesar de lo que estaba cayendo económicamente, se gastó 30 millones de pesetas en las 2.000 cestas de navidad con que obsequió a concejales y funcionarios.
La cuestión es que a partir de aquí, el telediario se desmadró. Porque empezó un goteo de llamadas de alcaldes actuales, del partido hormiguero, que pasaron directamente a antena y que en un instante, se convirtió en un verdadero diluvio de comunicados municipales que, como si de la cola del puesto del mercado se tratara, esperaban su turno para declarar de manera monocorde: Pues en mi ayuntamiento los cigarreros han dejado deudas por valor de ….
Y así fueron desfilando la intemerata de ediles hormigueros, que no les relaciono aquí para no aburrirles. La cuestión es que esas deudas municipales son, obviamente, deudas sin pagar (si no, no serían deudas); y los deudores son todos empresarios que han prestado servicios o vendido cosas a los Ayuntamientos. De lo que se infiere que esta es una de las razones poderosas de la crisis (¿qué crisis?, habría preguntado el cigarrero mayor hace poco mas de un año).
Pues miren ustedes, he buceado un poco en los informes del Banco de España y, según los datos más optimistas, la deuda de los municipios con las empresas españolas, una buena parte pequeña y mediana empresa, puede ascender a CINCUENTA MIL MILLONES DE EUROS, y ahora sí lo pongo en Euros, porque en pesetas ocuparía mas del poco espacio que me queda.
La conclusión a la que han llegado la mayor parte de los entendidos, y la casi totalidad de la gente normal (que no hace falta ser entendido para esto), es que al partido cigarrero lo que de verdad se le da bien es gastar. Eso lo hacen a las mil maravillas. Luego nos queda el ajo y agua (ya me entienden Uds.) y pedirle a Dios, o a otras deidades (porque a los cigarreros esto de Dios les da urticaria), que después queden vivos unos cuantos hormigueros, que vuelvan a llenar la despensa para que los cigarreros puedan hacer bien su trabajo: malgastar en veleidades.
