OPINIÓN. Inversiones potenciales y planes urbanos
DESDE MI ISLA ATLÁNTICA. Por Antonio Coll
Aunque aún no puedo cuantificar la cifra al día de hoy, sí me consta que empresarios lanzaroteños y residentes están optando en invertir fuera de la isla de Lanzarote. La causa principal es la ausencia de planes de ordenación urbanos y el Plan Insular de Ordenación del Territorio. La inseguridad jurídica creada en la isla desde hace años ha instalado una especie de ‘rompeolas’ y los empresarios se han visto en la tesitura de elegir otras islas canarias u otras zonas fuera del archipiélago, donde se les ofrece mejores condiciones y seguridad para invertir su dinero, dejando a Lanzarote huérfana de proyectos que, en los actuales tiempos, serían una bendición para crear economía y, por contrapartida, frenar el sangrante desempleo existente.
“El que avisa no es traidor”, reza el refrán. Desde este mismo medio he estado avisando desde hace muchos años, creo que desde el 2008, que la aprobación de los planes de ordenación local e insular era prioritaria para contar con los instrumentos necesarios para el desarrollo de la isla. Yo entiendo que muchas veces se redactan planes en beneficios de unos y en perjuicios de otros, lo que origina la judicialización de los mismos y el retraso de sus aprobaciones. En este sentido, la clase política gobernante en las distintas corporaciones de la isla debe velar en busca de el interés general y no dejarse influir por ‘lobbies sectoriales’ que sólo buscan el interés particular y el negocio rápido.
En este aspecto, también son responsables los funcionarios técnicos que, en ocasiones, ‘cocinan’ y redactan informes interesados, a sabiendas de los ‘atropellos’ colaterales que originan, provocando las ‘iras’ de los supuestos perjudicados, que acuden a los Tribunales como último recurso, en demanda de sus ‘derechos’. Sirvan de ejemplo los planes de Tías y Haría, que están recurridos ante el Tribunal Supremo, pendientes de una resolución definitiva ¿un año, dos años? Teguise recientemente aprobó el avance del Plan y se espera su puesta en marcha en un periodo, más o menos, de 18 meses. Tinajo tiene en vigor el plan del 2007 y San Bartolomé, igualmente pendiente de modificaciones en su zona industrial, una vez que el Cabildo apruebe el PIOT. Yaiza tiene pendiente la aprobación definitiva del Plan General de Ordenación Supletorio, en aplicación de las medidas que implanta la Ley de Medidas Urgentes del Gobierno de Canarias.
La ciudad de Arrecife es el caos de toda la isla. Es la más perjudicada, por culpa de su clase política y determinados sectores de la sociedad, ya que su plan aprobado inicialmente en el 2008 fue tumbado por la nueva corporación, saliente de las elecciones municipales del 2007, conformada por el PSOE-PIL y presidida por el alcalde Enrique Pérez Parrilla y meses más tarde se escenificó el ‘caso Unión’, de mal recuerdo para Arrecife. Cuatro años después, la capital de la isla sigue paralizada, si bien es cierto que el actual grupo de gobierno, presidido por el nuevo alcalde, el nacionalista Manuel Fajardo, se encuentra convencido de que en el 2013 puede ser aprobado de forma inicial, naturalmente, si no le ponen demasiadas piedras por el camino.
El objetivo es dinamizar y poner orden a una ciudad que se ha desarrollado de forma anárquica y ‘catastrófica’, cuyo resultado es su desordenación palpable, su desarraigo entre muchas zonas y un impacto medioambiental cutre, cuando la Naturaleza le brindó una marina extraordinaria para el disfrute de todos sus habitantes. En estos últimos cinco años, las inversiones de cierta consideración han sido nulas, cuando se tiene y se ha tenido a Arrecife como epicentro para dinamizar la economía de la isla. La falta del planeamiento urbanístico ha impedido también poner en marcha infraestructuras de gran trascendencia para la capital.
Por todo, Arrecife carece actualmente de un modelo de ordenación en su ámbito espacial. Carece de los mínimos elementos fundamentales para dibujar una ciudad de futuro, donde la arquitectura y la ingeniería civil integren a la ciudad en un modelo óptimo para el bienestar de sus pobladores. Arrecife tiene que dejar de ser una birria de ciudad. Un adefesio. Un esperpento.
El grupo de gobierno, conformado por CC-PSOE-AC, dirigido por el alcalde Manuel Fajardo, tiene la gran oportunidad de proyectar la ciudad con la nueva normativa urbanística, de la que en estos momentos se encuentra redactándose el avance. También espero la complicidad de la oposición –PP-PIL-PNL para que, entre todos, puedan regular las condiciones con el objetivo de transformar la ciudad, en beneficio de su prosperidad.
Lanzarote necesita, urgentemente, autoregularse para captar inversores de la tierra y foráneos. Para ello hay que crear confianza, ofrecer seguridad jurídica y facilidades a la hora de la presentación de los proyectos. Es la única forma de garantizar el futuro de la isla. Escarmentados y escaldados estamos del pasado. Que no se repita la historia.
PD. Una buena noticia. Desde el 2 de mayo se inició el plazo para que las pymes y autónomos puedan cobrar sus deudas pendientes de los siete ayuntamientos lanzaroteños. Los siete municipios adeudan, en su conjunto, 46 millones de euros. Esta partida será abonada directamente por las cajas y bancos, a través de la línea de crédito abierta por el ICO, aprobada por el Gobierno español de Mariano Rajoy. La Comunidad Autónoma canaria comenzará el 15 de mayo el abono de sus deudas, cercana a los 233 millones de euros, una de las comunidades del Reino de España con menos deudas contraída, según datos de Hacienda. Sin lugar a dudas, es un balón de oxigeno y servirá para paliar la estrecha situación económica de los miles de proveedores canarios. Y es que, después de tantos recortes y subidas de impuestos, la noticia es para ponerla en el más alto altar de la isla.