Domingo, 14 Diciembre 2025
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El Sive vuelve a demostrar su preocupante ineficacia

Lo ocurrido el pasado jueves debería suponer un importante toque de atención, ya que delata lo que puede estar sucediendo tal vez con cierta frecuencia en la isla. Aquel día, una patrullera de la Guardia Civil que pasaba de casualidad por el canal marítimo formado entre Lanzarote y La Graciosa se topó con una patera que llevaba no sólo inmigrantes irregulares, sino también un importante cargamento de droga. A tenor de la información oficial dada por la Benemérita, la patera no había sido detectada por los radares del Sive, ni tampoco por ninguno otro de los controles establecidos –o supuestamente establecidos- en las costas lanzaroteñas.
Es decir que si esa patrullera de la Guardia Civil no hubiera pasado en ese momento casualmente por allí, realizando una tarea que en este caso nada tenía que ver con el control de las costas, muy probablemente la docena de inmigrantes irregulares que viajaban en ella y los 40 kilogramos de hachís que llevaban estarían en Lanzarote sin que nadie se hubiese enterado.
No podemos creer que este sea un caso aislado, ya que son reiteradas las ocasiones en las que llegan pateras a la isla -.sobre todo a la zona Norte- sin que el Sive ni nadie de la Guardia Civil siquiera se enteren. De hecho, las tres anteriores pateras que se supo arribaron a Lanzarote no fueron detectadas por las fuerzas de seguridad, ya que sólo se supo de ellas cuando dieron la voz de alerta los vecinos, o cuando se encontró la embarcación abandonada en la costa. Por el contrario, hace meses que no sabe de una patera detectada por la Guardia Civil, excepto con la que casi chocaron por casualidad el jueves pasado.
Así, la poca utilidad del Sive, pese a la millonaria inversión que supuso, queda totalmente al descubierto, como también la ridiculez de las estadísticas oficiales que dan cuenta de la cantidad de pateras que llega a Lanzarote; estadísticas que para ser serias, deberían decir que se trata de la cantidad de pateras de las que se han enterado que han llegado, que al parecer son muchas menos de las que realmente llegan.
Con todo, es innegable que el flujo migratorio irregular ha bajado muchísimo no sólo en Lanzarote, sino en toda Canarias y en España en general. Pero esto, más que un mérito que deban apuntarse el Sive y la Guardia Civil, es un “mérito” que debe apuntarse el Gobierno central por tener a España a la cola de Europa en el actual contexto de crisis económica. Si los inmigrantes tanto ilegales como legales que ya estaban establecidos en España se están yendo en masa ante las penurias que pasan, es entendible que sean cada vez menos los extranjeros que quieran llegar a este territorio.
Lo peor de esta nueva situación migratorio es que ante la crisis y el desempleo, es probable que algunos o varios de quienes decidan ahora hacer la aventura de lanzarse en patera hasta aquí, no lo hagan con la esperanza de encontrar un trabajo, sino con alijos de drogas a cuestas, para tener asegurada su subsistencia al menos en las primeras semanas desde que llegan.
Por ello, la Guardia Civil y el Estado en general deben dejar de presumir de una eficacia que no es tal, y admitir que pese a la gran reducción en la cantidad de pateras que llegan, siguen siendo incapaces de localizarlas por los medios correspondientes. Y por lo tanto, se debería hacer lo que sea necesario para que ese Sive del que tanto se ha alardeado y que tanto dinero costó a todos los españoles, realmente sea eficiente. De lo contrario, está latente la posibilidad de que sigan llegando en pateras droga y las personas que la transportan –que lo malo no es que sean inmigrantes irregulares, sino en estos casos evidentemente delincuentes-, a no ser que se sucedan los golpes de suerte de la Guardia Civil., cuya eficiencia en este caso parece brillar por su ausencia, ya sea por falta de medios adecuados o por lo que fuera.

Lancelot Digital


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