Razones para votar y temor a la abstención
Por Antonio Coll
El 25 de mayo, todos los pobladores que conforman la llamada Unión Europea, están llamados a las urnas para constituir el nuevo Parlamento Europeo. Es obvio que las decisiones que se toman en Bruselas o Estrasburgo, afectan a Canarias, más de lo que, en cierta forma, una gran mayoría percibe. El mensaje erróneo, de muchos canarios, de propagar la idea de que “Europa está muy lejos”, es cierto, en el ámbito geográfico, pero no en las cuestiones importantes, como son las políticas económicas y otras decisiones de gran influencia para el futuro de las islas. Es posible que, en los últimos años, el proyecto de fortalecer la Unión Europea, se halla algo encallado, quizás porque el deterioro económico que se padece desde el 2008, ha castigado, con dureza, a millones de familias, empobreciendo su economía doméstica, así como a miles de empresas y autónomos, que se han visto abocadas a cerrar sus negocios. En este aspecto, tienen razón los que critican las directrices de Bruselas, que se ha visto incapacitada para hacer frente y atenuar las terribles consecuencias de una crisis mal gestionada y que ha perjudicado a los más débiles y clases medias.
Pero la realidad, es que las islas seguirán integrada en la U.E. y todo lo que en el Parlamento se decida, nos afectará directamente. En el llamado Reino de España, se eligen 54 eurodiputados que representa el 7% del total: 751 parlamentarios. Más de 500 millones de electores europeos están llamados a las urnas. La novedad más importante, en estas elecciones europeas del 25M, es la utilización de las redes sociales, por parte, sobre todo, de los candidatos o formaciones políticas poco conocidas. La influencia digital es una realidad. Las redes más utilizadas son: Twitter, Facebook, YouTube y en menor porcentaje, Linkedin.
Es obvio que todos queremos una Europa más unida, útil y en defensa de los derechos de todos los ciudadanos. Para ello la U.E. tiene que avanzar y demostrar que sus gestiones van en beneficio de los pueblos, de su progreso y bienestar. Los canarios ya conocemos que múltiples decisiones importantes ya no se toman en Madrid, sino en Bruselas. Por eso, hay que alejarse de demagogias populistas que incitan a la abstención. Hay razones de peso para ir a votar. Para el próximo periodo 2014-2020, la Unión Europea, ha presupuestado para Canarias, 2.200 millones de fondos estructurales. Esto significa situarnos en la segunda comunidad autónoma mejor financiada por habitante. La condición de región ultraperiférica o de ultramar, implica un tratamiento diferenciado, como los tienen otros archipiélagos o islas, pertenecientes a Portugal y Francia.
Son muchos los problemas que Canarias tiene que resolver, considerándose prioritario disminuir la abultada tasa de paro, que ha ido aparejado con el retroceso de renta. Para ello hay que cambiar las políticas desarrolladas hasta hoy y fortalecer la innovación y la competitividad de las empresas, modernizar la agricultura, la pesca e incentivar la industria. Pero estas cuestiones competen, directamente, a las administraciones públicas canarias que, en los últimos tiempos, no ha sabido implantar estrategias y mecanismos para el buen desarrollo económico y social de las islas. El desempleo y el incremento de la pobreza, es al día de hoy, una realidad y que puede traer consecuencias muy nefastas cara al futuro. La responsabilidad de nuestros gobernantes, en cambiar el rumbo, es prioritaria. De lo contrario, aumentará el desencanto y los problemas sociales.
Hay razones para votar, aunque sea en blanco. La abstención es indefinible.