Domingo, 14 Diciembre 2025
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Por Antonio Coll

 

 

En la edición diaria del ABC del pasado 6 de diciembre, aparece una información, firmada por Emili J. Blasco, corresponsal en Washington del citado periódico, donde anuncia la reaparición al papel de la prestigiosa revista estadounidense <Newsweesk>, después de haber cerrado la edición impresa y solo publicarse en online.  Para todos aquellos que aún seguimos siendo fieles a la prensa impresa en papel, no deja de alegrarnos pues constituye una vuelta hacia atrás y puede iniciar una nueva etapa para la prensa escrita. También puede echar por tierra las constantes profecías en referencia a los maléficos mensajes de que la permanencia de la  prensa de papel “tiene los días contados”, ante la aparición de los nuevos dispositivos electrónicos y digitales.  En mi opinión, todos los medios son complementarios y, pienso, que todos pueden convivir y  jugar su rol en la sociedad actual, globalizada y multicultural.

 

 

Por pura coincidencia, la empresa editora del semanario Lancelot también ha anunciado la salida de nuevo de la publicación, en este caso, está prevista una edición especial para el próximo 23 de diciembre, con todas las posibilidades de publicarse semanalmente mucho antes de iniciarse la primavera.

 

Mientras se exaltan estas noticias prometedoras y halagüeñas para la prensa de papel, el Colegio Nacional de Ópticos-Optometristas de España, en un reciente comunicado, recomienda y aconseja de no abusar del uso de tabletas, e-books, móviles digitales y otros “artilugios” electrónicos, ante el aumento de molestias oculares, detectadas en los últimos tiempos. Los síntomas, según los profesionales, son molestias oculares, pesadez de ojos, picores, tensión ocular, aumento del parpadeo, diplopía (visión doble), cefaleas, entre otros síntomas que producen fatiga visual. Naturalmente, advierten de que todo dependerá de las horas diarias  que se dedique a la lectura,  a través de los soportes electrónicos.

 

Cuenta el corresponsal de ABC en Estado Unidos que el cierre del famoso semanario Newsweek, pareció simbolizar el fin de la era impresa y el comienzo definitivo de la digital. Escribe el periodista Emili J.  Blasco, que los nuevos editores aspiran a mantener la revista con un contenido de máxima calidad, potenciando las suscripciones y aumentando el departamento de Redacción actual, dedicada a la versión online. Solo decir que la revista norteamericana nació en 1933 y en la década de 1990 llegó a vender más de 3,3 millones de ejemplares. La audiencia fue espectacular, si multiplicamos el número de lectores, ya que cada ejemplar adquirido lo pueden leer una media entre 5 y 8 lectores. La media establecida de lectura del semanario Lancelot, tras 32 años de vida, estaba en 6,2 por cada ejemplar, según diversos estudios de audiencia y el Instituto Perfiles de Canarias.

 

También he de contar que el prestigioso diario “Washington Post”, famoso por destapar las irregularidades y corruptelas del Presidente Nixon, que fue obligado a dimitir, sigue en la palestra, cuando se anunciaba su cierre, gracias al nuevo propietario, Jeff Bezos, creador del gigante de Internet Amazon, que está convencido de las posibilidades  que sigue ofreciendo el diario, según se expresa en ABC.

 

Independientemente de los soportes que se utilicen, lo que está claro es que el “todo gratis” está perjudicando a la esencia del periodismo, porque sostenerse solo del mercado publicitario, es complejo y tiende a empeorar la calidad de los contenidos, en una sociedad cada vez más exigente, mejor formada e informada.

 

A la espera de la salida de la edición especial del semanario Lancelot, impreso en papel,  en la víspera de la celebración de la Navidad, por obvios motivos este artículo está obligado a leerlo en versión online, no olvidando las recomendaciones de los ópticos, para evitar los trastornos relacionados con el Síndrome de Fatiga Visual.

 

Con este escrito no intento desmantelar los anuncios de las dificultades que vive el periódico de papel, pero existen nuevos signos para confiar en el futuro del periódico de “toda la vida” , adaptándose a los nuevos tiempos y con el fuerte compromiso de servir a una sociedad que se está transformando, exigiendo más transparencia, libertad y justicia. 


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