Sea cual sea el término de búsqueda que introduzcas en Google, instantáneamente aparecen ingentes cantidades de resultados. En concreto son páginas web cuyos contenidos han sido previamente rastreados y, acto seguido, indexados a modo de resultados. Es lo que conocemos bajo el nombre de crawl. No es difícil comprender el Significado Crawling, consistiendo básicamente en la indexación de los portales online a través del mencionado rastreo.

Es inviable que el motor de búsqueda haga de forma manual este proceso. Por mucho dinero que tenga dicha multinacional, no sería posible que miles de trabajadores accediesen una por una a todas las webs con tal de llevar a cabo su respectiva indexación.

Al tratarse de un procedimiento automático, es importante conocerlo a fondo para que el mismo beneficie a tu propio portal. En Lanzarote hay muchos expertos en posicionamiento web, siendo un claro ejemplo el de las agencias de marketing online. Hemos hablado con ellos para que nos revelen qué acciones son las más beneficiosas de cara a un crawling favorable, el cual concluirá con una indexación que te posicionará en los primeros resultados de búsqueda.

Diseño web atractivo, intuitivo y responsive

Es un error creer que el crawling tan solo se centra en el contenido. Y es que el rastreo también abarca otros aspectos que guardan relación con la estructura de la web en sí.

Google nunca indexará favorablemente una página con la que es difícil de tratar, por ejemplo aquellas que tienen unos menús demasiado rebuscados con ingentes cantidades de desplegables.

Todo lo contrario sucede con los sitios web que son intuitivos. La sencillez no implica dar forma a un portal en línea cuyo aspecto visual deje que desear. Todo lo contrario: hay muchos ejemplos de páginas lanzaroteñas que no solo son bonitas, sino que a su vez resultan fáciles a la hora de navegar por ellas.

Así pues, la primera clave para que el crawling sea beneficioso para tu proyecto online consiste en dar forma a una estructura que resulte atractiva para el usuario, proporcionándole facilidades para encontrar siempre justo lo que busca. De esta manera se reduce al máximo posible el porcentaje de rebote. Es decir, los internautas no abandonan prematuramente la web, lo cual afecta de manera muy positiva al posicionamiento.

Para dicho último resultado también es importante que la página sea responsive. Es decir, conviene que se vea a la perfección indistintamente del dispositivo del que haga uso cada persona a la hora de acceder a ella.

Nuevamente hay que hablar de Lanzarote, puesto que en esta preciosa isla de las Canarias existen varias agencias capaces de dar forma a un portal online responsive cuyos contenidos se adaptan al tamaño de la pantalla de cualquier aparato tecnológico.

Contenido de calidad publicado regularmente

El crawling no solo se produce en una única ocasión. Google manda a sus ‘arañas’ a llevar a cabo los rastreos cada cierto tiempo, por lo que es fundamental que cuando dichas spiders lleguen a tu página web, encuentren nuevo contenido para que sea indexado de forma adecuada y, a su vez, bien posicionado en los resultados de búsqueda.

Varios aspectos son tenidos en cuenta. Uno de los más relevantes es el de la regularidad. El crawling de Google favorece a las páginas web que se actualizan semanalmente con nuevos contenidos. Por ejemplo, dos o tres veces a la semana suele ser suficiente.

Sin embargo, es preferible reducir esa cifra a cambio de que la calidad de dichos contenidos no se vea afectada. Es decir, si tienes que elegir entre muchas publicaciones que dejen un poco que desear o bastantes menos que resulten útiles de verdad para el lector, opta sin duda alguna por esta última alternativa.

Si quieres que la indexación sea beneficiosa a más no poder, es esencial que el contenido que publiques contenga las palabras clave que pretendes posicionar. Cuando la spider detecte su presencia, sobre todo si tiene aproximadamente un porcentaje de un punto respecto al total del texto, dotará de relevancia al sitio web y, por ende, aparecerá en lo más alto de los resultados de búsqueda.

Otra clave que sí o sí has de aplicar para que te favorezca el crawling se resume en colocar en el texto los conocidos como backlinks internos. En concreto son enlaces que dirigen a otras secciones o contenidos de tu propia página web. Se trata de otro aspecto que valora muy positivamente Google, el cual en caso de potenciar acabará repercutiendo en el posicionamiento del portal online.

Pero, ¿cómo dar forma a todo este contenido tan favorable? Tal vez tu página web no dé pie a poder publicar textos de calidad y con regularidad, por ejemplo si se trata de un comercio electrónico en el que los usuarios solo quieren comprar los productos online. En este tipo de casos es muy buena idea hacer un blog dentro del mismo dominio, beneficiando así tanto a esa URL como a la del portal online principal.