¿Cómo se realiza una operación de aumento de pecho?
- Lancelot Digital
Una operación de aumento de pecho se considera una intervención quirúrgica no muy compleja. Aunque claro está, los resultados estéticos son claramente notables en mayor o menor medida, dependiendo del tamaño del implante, el tamaño natural del seno, la contextura del paciente, etc.
Por supuesto, para quienes están a punto de realizarse una operación de aumento de pecho, es de vital importancia conocer todo el procedimiento a realizar. Teniéndolo en cuenta, en este artículo se muestra cada uno de los pasos desde el preoperatorio hasta la intervención.
¿Por qué es importante saber cómo es la operación de aumento de pecho?
Para quienes estén a punto de realizarse un aumento de pecho es de vital importancia conocer todo lo relacionado el procedimiento de la operación de pecho, con el fin de poder plantearle al cirujano todas las dudas y este las responda debidamente.
Además, es un acto de responsabilidad del paciente consigo mismo, el tratar de conocer lo mayor posible todo respecto a su cuerpo, y más aún si de intervenciones quirúrgicas se trata.
El conocer todo el procedimiento le da al paciente una mayor sensación de seguridad. Como resultado va a estar mucho más tranquilo a la hora de la intervención, e incluso el proceso de recuperación podría ser mucho más rápido y eficiente.
La preparación previa a la cirugía
Para empezar, se deben cumplir una serie de requisitos antes de someterse a la intervención. Mínimo, unos dos meses antes se debe haber dejado de fumar completamente. Además, se debe procurar un cuidado preciso en la alimentación.
Antes de entrar al quirófano se deben haber organizado todos los medicamentos e instrumentos necesarios para la recuperación. Lo ideal es evitar en la medida de lo posible la necesidad de salir, conducir o realizar cualquier actividad forzosa en los primeros días de la recuperación.
Proceso de la operación de aumento de pecho
Aunque la operación sea corta y relativamente sencilla se deben seguir una serie de pasos para llevarla a cabo. A continuación, se muestra todo el procedimiento llevado a cabo.
Aplicación de la anestesia
Antes de empezar la operación el paciente es anestesiado de manera general y en la zona específica a trabajar, es decir, durante el procedimiento se mantiene totalmente dormido y no siente dolor.
En algunos casos se podría utilizar solamente anestesia, aunque no es del todo recomendado. Lo ideal es mantener dormido al paciente para proveer mayor relajación muscular facilidad a la hora de la intervención.
Realizar la incisión
Al realizar la incisión, el cirujano la realiza del menor tamaño posible, aproximadamente de unos 4 o 5 cm. Técnica más común para esta incisión consiste en efectuar un corte en la parte inferior del seno es decir en el pliegue o surco de la misma.
Existen otras tres técnicas. La segunda más común radica en realizar un corte en la parte inferior de la aureola, llamada incisión transaxilar. Como tercera, usando un endoscopio, se puede realizar la apertura por debajo del brazo, prácticamente en la zona de la axila.
Por último, existe otro método de incisión. No es tan común y es viable únicamente para los implantes de solución salina. Se realiza un corte cerca del ombligo y con la utilización nuevamente de un endoscopio, se lleva el implante hasta el seno. Una vez puesto en el lugar, se llena con la solución salina.
Colocar el implante
Para el posicionamiento del implante existen dos zonas. La primera, es bajo el músculo pectoral, llamado también colocación submuscular; es la más común. En la segunda, el implante se coloca detrás del tejido mamario, pero por encima del músculo pectoral; se le llama colocación subglandular.
Elegir entre un tipo de colocación y otra depende de varios factores, entre ellos el implante elegido. Además, la contextura física del paciente es muy importante. Sin embargo, lo más indispensable a tomar en cuenta son las recomendaciones del médico cirujano para la operación de aumento de pecho.
Por último, cerrar la herida
La última fase de una operación de aumento de pecho radica en la en la correcta sutura de las incisiones realizadas. La sutura se realiza en capas y se terminan con adhesivo cutáneo o cinta quirúrgica. Esta fase es muy importante para la correcta cicatrización y la obtención de una herida lo menos visible posible.
Elegir el implante correcto
Aunque la única idea que se suele tener de un implante mamario, es la del implante de silicona redondo, en realidad existen muchos más tipos, y, además, no solo son de silicona.
Implantes de solución salina
Antes del auge de la silicona como material para los implantes mamarios, la utilización más popular venía de la solución salina. Son implantes con una recubierta de silicona. Se insertan vacíos, es decir, únicamente con la bolsa como recubrimiento, y al estar dentro del cuerpo se rellena con solución salina.
La ventaja principal de estos implantes radica en poder elegir el tamaño adecuado en la misma intervención. Se llenan dentro del cuerpo hasta conseguir el tamaño deseado. En caso de una ruptura, la solución salina es absorbida por el mismo cuerpo de manera natural.
Implantes de silicona
Actualmente son los más utilizados, a pesar de ser un poco más caros en relación a los de solución salina. Vienen en distintas formas y tamaños a elegir. Por el contrario, a los de solución salina, en caso de sufrir una ruptura, el implante se mantiene en su sitio e incluso la ruptura podría ser imperceptible.
Implantes de acuerdo a su forma
Aunque los más comunes para una operación de aumento de pecho son los redondos, existen otros dos tipos. El segundo más usado es el implante anatómico. Son también conocidos como implantes en forma de gota.
Poseen una forma similar a la del pecho natural de una mujer, es decir, son más delgados en la parte de arriba y más anchos en la parte cercana a la inferior. Por otro lado, están los implantes ergonómicos; su forma se adapta a la posición de la persona, ofreciendo una apariencia natural.
