Viernes, 05 Diciembre 2025
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  • Lancelot Digital

 

 

Vender o comprar una moto de agua requiere algo más que entregar las llaves y firmar un papel. Este tipo de embarcación está regulado legalmente y su transferencia debe seguir una serie de pasos que garanticen la legalidad del proceso y protejan tanto al comprador como al vendedor. Desde tener la documentación al día hasta formalizar la inscripción del nuevo propietario, todo debe realizarse con precisión. Sigue con nosotros y descubre el paso a paso.

 

Reunir la documentación de la moto de agua

 

Antes de iniciar el proceso, es imprescindible tener toda la documentación de la moto de agua en regla que abarca:

 

 

  • Título de propiedad o factura original de compra.

 

    • Certificado de inscripción marítima o en el registro correspondiente.

 

  • Número de identificación del casco (CIN) visible en la estructura.

 

    • Ficha técnica del motor y características de la embarcación.

 

  • Seguro náutico en vigor (si aplica).

 

 

Estos documentos son la base para demostrar que el propietario actual es quien tiene derecho a vender la moto de agua y permiten que el comprador tenga la tranquilidad de adquirir un bien libre de problemas.

 

Verificar que la embarcación no tenga cargas

 

Uno de los pasos más importantes antes de proceder con la compraventa es comprobar que la moto de agua no presenta cargas, embargos o deudas pendientes. Hazlo solicitando un certificado de cargas en la Capitanía Marítima correspondiente.

 

Este documento refleja si hay algún impedimento legal que afecte a la embarcación, como pagos pendientes de impuestos o tasas portuarias. Solo una moto de agua libre de cargas puede ser transferida legalmente.

 

Firmar un contrato de compraventa

 

Una vez verificado que todo está en orden, se redacta y firma un contrato de compraventa con los datos del vendedor y del comprador, los detalles técnicos de la moto de agua (marca, modelo, número de identificación del casco, matrícula, etc.), el precio acordado, forma de pago y la fecha de entrega.

 

Firmar ese contrato protege a ambas partes y deja constancia de las condiciones de la operación. Es muy relevante conservar una copia del documento una vez completado el proceso.

 

En este punto, te recomendamos la transferencia moto de agua online a través de plataformas como Gestioon, una herramienta que simplifica el trámite  sin que te desplaces; sin duda, algo muy útil para quienes no tienen tiempo o experiencia en gestiones náuticas.

 

Solicitar la transferencia en el registro correspondiente

 

Con el contrato firmado y la documentación completa, el siguiente paso es registrar oficialmente la transferencia. Este trámite debe llevarse a cabo ante la administración marítima correspondiente o el Registro de Buques y embarcaciones de recreo. Allí se formaliza el cambio de titularidad, se actualizan los datos del propietario y se entrega un nuevo certificado de inscripción a nombre del comprador.

 

La transferencia no se considera finalizada hasta que este paso se haya completado. Ignorarlo te dará problemas legales en el futuro, como multas o responsabilidades que recaigan sobre el antiguo propietario.

 

Actualizar el seguro náutico

 

En paralelo, es preciso gestionar el traspaso o cancelación del seguro náutico. Si el nuevo propietario desea mantener la póliza, deberá contactar con la aseguradora y realizar el cambio de titularidad. En otros casos, se puede contratar un seguro nuevo desde cero. No te saltes el paso porque es la manera que tendrás de asegurar cobertura en caso de accidentes o situaciones legales tras la venta.

 

Informar sobre el lugar de estacionamiento o amarre

 

Si la moto de agua tiene un espacio fijo de amarre en un puerto o marina, también es necesario informar a la administración correspondiente sobre el cambio de propietario. En muchos casos, el espacio de amarre está vinculado al titular del vehículo, por lo que será necesario firmar un nuevo contrato o realizar el traspaso. De esta manera, evitas malentendidos y colaboras con el uso legal del espacio asignado.

 


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