Es normal que las madres primerizas se sientan agobiadas por los llantos de sus pequeños hasta llegar a sentir que quieren unirse a su lamento. Por lo cual, tienes que tener en cuenta, que todos los recién nacidos son inquietos y lloran por diversas razones. Sin embargo, si los infantes están sanos pero presentan episodios de inquietud y llanto prolongado quizás se deba al famoso cólico del lactante. Este cólico, se suele presentar en el bebé durante unas tres horas al día aproximadamente, y los especialistas casi siempre reconocen esta afección antes de que llegue a un punto crítico.

De qué trata este padecimiento

Se trata de dolores abdominales, que suelen aparecer de forma intensa y con gran frecuencia. Cuando los bebés se enfrentan a estos dolores, reaccionan con agitación, gases y llantos. Existen estudios que concluyen que el 50% de los niños alimentados con biberón o pecho, suelen sufrir estas dolencias desde las dos primeras semanas de vida hasta aproximadamente los cuatro meses.

Las causas que pueden desencadenar los cólicos, suelen ser debido a problemas digestivos, inmadurez del sistema nervioso, intolerancia a la leche, ansiedad de los padres, entre otras causas. Cuando su pequeño tiene estos serios problemas, lo ideal es buscar la ayuda de especialistas que te indiquen el tratamiento adecuado para ello. Sin embargo, con la ayuda de un saco térmico para bebé, lograrás aliviar rápidamente los molestos cólicos del bebé.

A continuación, te presentamos una serie de consejos que servirán para calmar los gases del pequeño:

• Cuando estés dando el pecho, evita las especias, las legumbres y los vegetales como el brócoli, la col y otras más.

• Para alimentar el bebé con biberón, es aconsejable evitar que tome aire por medio de la tetina. Para estos casos, la recomendación es el uso de biberones anti reflujo, y se debe tratar de que el niño eructe adecuadamente.

• No cambiar el tipo de leche sin consultarlo con el especialista.

• Realizar masajes al bebé en el vientre en el sentido de las agujas del reloj, de esta forma, aliviarás las molestias del pequeño.

• Aplicar el uso de portabebés, ya que la posición vertical en los pequeños contribuye a aliviar los dolores.

Causas de los cólicos en los lactantes

Los especialistas, aún no están muy seguros de cuál es la causa que produce cólicos a los lactantes. Sin embargo, la mayoría piensa que se debe a cierta intolerancia a la leche de vaca, aunque hoy en día, se piensa que esto solo ocurre en algunos casos. Ciertos especialistas, atribuyen los gases a una mala alimentación de la madre, cuando esto ocurre deberán eliminar de su dieta la cafeína, los huevos, la soja o los productos que contengan trigo.

Por otra parte, teorías más especializadas afirman que los cólicos se presentan cuando el alimento atraviesa de forma muy rápida el sistema digestivo del niño. Esto significa, que el pequeño podría estar asimilando los alimentos de forma incompleta. Otros sin embargo piensan que el cólico se puede deber a los cambios de temperamento del bebé, ya que algunos suelen tardar un poco más de tiempo en adaptarse al mundo exterior. Existen otras teorías, que vinculan el cólico con la migraña, esto suele suceder en niños con madres que son adictas al tabaco o al alcohol.

Recomendaciones para enfrentar esta situación

La mayoría de las veces, las flatulencias o cólicos en los bebés aparecen después de la alimentación. Por esta razón, es de gran importancia que la última vez que el niño coma por la noche sea por lo menos una hora antes de irse a dormir. Además de eso, también es primordial hacer que el niño libere los gases, esto se logra dándole palmadas suavemente en la espalda. Recuerda que los cólicos son la causa principal de que los pequeños no duerman bien durante las noches.

Como ya se mencionó anteriormente, los cólicos aparecen desde el nacimiento, y suelen extenderse hasta que el bebé alcanza los cuatro meses de vida. La manifestación más común es el llanto y la desesperación constante del niño antes de irse a dormir, lo cual, os deja agotados de tanto llorar durante varias horas seguidas. Todo esto, agobia a los padres y a los otros niños de la casa, para ello se recomienda el uso de juegos para su entretenimiento.

No obstante, se debe tener claro que no existe un tratamiento único para esta dolencia, y muchas personas piensan hoy en día, que él bebé no debería llorar demasiado por un simple problema digestivo. Sino que más bien, lo atribuyen a que el cansancio diario altera su sistema nervioso que aún es inmaduro y se acelera con facilidad.

Para finalizar, cualquiera que sea el problema que tenga el pequeño, lo ideal es buscar ayuda de expertos que te ofrezcan asesoría. Así como también, se deben tener en cuenta los consejos de otras madres que puedan orientaros en esos problemas comunes de los que ninguna madre se ha salvado. Es importante también, que él bebé no se estrese al alimentarse, y que reciba los estímulos de la madre desde antes de su nacimiento, es casi seguro, que solo con eso ganaras en segundos de tranquilidad.