Cuida Tu Cuerpo y Mente con Desayunos, Fajas y Psicólogos
Encontrar la definición de bienestar de forma precisa no es una tarea sencilla. Sin embargo, gracias a las definiciones proveídas por la Organización Mundial de la Salud y la Real Academia Española, podemos entender al bienestar como el estado de equilibrio entre una buena salud y buen funcionamiento de nuestro cuerpo y mente, donde todas nuestras necesidades básicas están satisfechas y donde vivimos con un propósito definido.
Desde una visión más amplia, el bienestar de los seres humanos depende de factores que afectan de forma directa o indirecta a nuestros cuatro pilares fundamentales: cuerpo, mente, alma y espíritu. Por ello, mantenernos sanos en todos estos aspectos resulta esencial para mantener un equilibrio armónico entre estos pilares y así conseguir un estado de bienestar pleno. Pero, para alcanzarlo, debemos empezar por conocernos y saber hacia dónde vamos.
¿Cómo influye la autopercepción en nuestro bienestar?
La autopercepción es la forma en cómo nos vemos a nosotros mismos. Tiene una influencia directa sobre cómo nos sentimos a diario, cómo actuamos ante determinadas situaciones y con qué actitud afrontamos cada reto. Por ello, cultivar una autopercepción positiva puede mejorar notablemente nuestra calidad de vida en muchos aspectos.
Cuando nuestra autopercepción es positiva, somos conscientes de quiénes somos y de lo que somos capaces, nuestra autoestima se eleva y la confianza en nosotros mismos se fortalece. Sin embargo, cuando solo vemos lo negativo de nosotros, empezamos a tener sentimientos de inferioridad y nos sentimos inseguros, potenciando una baja autoestima y dando pie al desarrollo de trastornos de depresión y ansiedad.
En consecuencia, según como esté nuestro grado de autopercepción, nuestra salud mental se verá afectada de forma positiva o negativamente, teniendo un impacto directo en nuestro bienestar. Afortunadamente, contamos con la guía oportuna y profesional de Psicólogos Online, quienes nos ofrecen terapias en línea para ayudarnos a mejorar nuestro concepto de sí mismos, fortaleciendo nuestra autoestima y potenciando nuestro desarrollo personal.
La importancia de una buena alimentación
El cuerpo y la mente van de la mano. Por eso, la alimentación es clave para mantener un estado bienestar integral y equilibrado. Por un lado, una dieta saludable y balanceada nos permitirá, a nivel físico:
- Tener un sistema inmunológico fortalecido, gracias al aporte de vitaminas y minerales que aumentan nuestras defensas.
- Mantener o alcanzar un peso ideal, reduciendo el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y teniendo un impacto directo en nuestra autopercepción.
- Sentir mayor energía, ya que con los nutrientes obtenidos con una buena alimentación podremos llevar a cabo nuestras tareas del día sin sentir agotamiento extremo.
Claro está que de vez en cuando podemos permitirnos disfrutar de deliciosos desayunos sorpresa o de un antojo que valga la pena. Sin embargo, debemos estar muy atentos al cuidado de nuestra alimentación, ya que nuestra mente también se favorece de ella, en aspectos como:
- El buen estado de ánimo, pues está comprobado que los alimentos ricos en Omega-3 y otros nutrientes, reducen síntomas de depresión y nos ayudan a afrontar cada día con la mejor actitud posible.
- Mejora de la concentración y la memoria, ya que nuestro cerebro recibirá los nutrientes necesarios para funcionar de manera óptima.
- Menos estrés y ansiedad, pues una buena alimentación nos provee de vitaminas, minerales y otros nutrientes, como el magnesio, que ayudan a reducir el impacto del cortisol y la adrenalina en nuestro organismo.
Otras formas de cuidar nuestro bienestar
Lograr un nivel de bienestar óptimo depende de múltiples factores que actúan en consonancia. Por eso, además de cuidar de nuestra salud mental mediante terapias y de nuestro cuerpo mediante la alimentación saludable, también debemos mantener otros aspectos bajo nuestra atención para sentir un verdadero estado de bienestar.
En lo físico
Existen hábitos personales que contribuirán a que nos sintamos mejor y cada vez más cómodos con nuestro cuerpo. Algunas de estas, son:
- Realiza alguna actividad física de forma regular, bien sea salir a caminar, practicar algún deporte o hacer alguna actividad como yoga o bailar.
- Duerme al menos 8 horas diarias y toma los descansos necesarios durante el día.
- Mantén una buena higiene personal y en tu entorno. Así no solo prevendrás la aparición de enfermedades, sino que sentirás mayor seguridad y confianza.
- Recarga tu cuerpo de vitamina D con breves exposiciones al sol.
No obstante, la apariencia y la estética también son importantes. Por lo que te recomendamos siempre mantener bien cuidado tu cabello y vello facial, vístete cómodo, pero a la moda y aprovecha los beneficios de las fajas colombianas para sentirte aún mejor. Estas últimas, en especial, tienen la bondadosa ventaja de que no solo te hacen lucir un cuerpo más esbelto, sino que también ayudan a mejorar tu postura y a quemar grasas, mejorando notablemente tu autoestima y teniendo un impacto directo sobre tu seguridad y confianza.
En lo social
Nuestro entorno influye de forma directa o indirecta con nuestro bienestar. Por eso, es recomendable cuidar varios aspectos de nuestras relaciones interpersonales, entre estos:
- Cultivar relaciones saludables, rodeándote de aquellos que te hagan sentir bien y aporten cosas positivas a tu vida.
- Involúcrate con grupos o comunidades que compartan tus intereses.
- Participa en voluntariados o servicios comunitarios, pues las actividades filantrópicas suelen tener un impacto positivo en nuestro estado de ánimo y complementan nuestras necesidades de realización.
- Aprende a comunicarte con asertividad, transmitiendo tus opiniones y necesidades con claridad, pero de forma respetuosa.
- Reduce el tiempo que pasas en las redes sociales y haz más vida social en persona. Las redes son buenas, pero exponernos tanto tiempo a ellas nos hacen propensos a compararnos con otros y perjudica nuestra autopercepción.
En lo económico
Gran parte de nuestra estabilidad y tranquilidad depende de cuán saludable están nuestras finanzas. Por eso, es importante que no dejes de lado estos consejos.
- Haz un balance entre tus ingresos y gastos. Así, sabrás si estás consumiendo más de lo que ganas y podrás crear un presupuesto para manejar de mejor forma tus finanzas.
- Plantéate una estrategia de ahorro para el futuro a corto, mediano y largo plazo.
- Invierte en tu educación y aprende nuevas habilidades que sirvan para mejorar tanto tu vida profesional como personal.
- Controla tus deudas, págalas a tiempo y evita las deudas nuevas si no son necesarias.
- Diversifica tus ingresos. No te quedes solo con el sueldo de tu empleo y prueba emprender en negocios de bajo riesgo. Por ejemplo, puedes iniciar un negocio de ropa femenina invirtiendo en fajas colombianas al por mayor; así no solo podrás ganar un dinero extra, sino que ayudarás a otros a sentirse bien.
El bienestar no es un estado fijo, sino que evoluciona con nosotros. Tampoco es un estado de salud plena o ausencia de enfermedades. Por eso, cuidando cada aspecto de nuestro ser y atendiendo a las cosas que estén bajo nuestro control, podremos conseguir sentirnos cada vez mejor y también cubrir las necesidades más urgentes, haciéndonos sentir cada vez más satisfechos con nosotros mismos.