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¿Debo invertir en Ford en 2023?

 

  • Lancelot Digital
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    La firma del óvalo es una de las más importantes de Estados Unidos y una de las compañías más fuertes del Nasdaq.

     

    Cuando hablamos de Ford Motor Company lo hacemos de una de las principales empresas de Estados Unidos y también del mundo del motor.

     

    Seguro que cada día ves su famoso logo azul en tu calle o en la carretera. Estamos ante una empresa histórica y famosa que tiene su lugar en empresas del nasdaq 100 y que suele ser una elección entre la comunidad de inversores.

     

    Sus acciones cayeron más de un 30% en 2022

     

    Al caer sus acciones de forma considerable en 2022, muchas personas se preguntan si habrá más perdidas en 2023 o si, por el contrario, es una magnífica oportunidad de comprar. Vamos a considerar algunos temas importantes:

     

    ¿Se aproxima una tormenta económica?

     

    Algún factor en contra sobre invertir en Ford para 2023 existe. No olvidemos que los coches son unos artículos que suponen un elevado coste para el consumidor o para las compañías que los adquieren.

     

    En Estados Unidos, el coste de compra de un coche nuevo fue de unos 45.844 dólares. Si pensamos que los ingresos familiares de media en Estados Unidos son de 70.000 dólares anuales, nos haremos una composición de lugar de la importancia de esta adquisición para los bolsillos.

     

    Merece la pena tener en cuenta que han aumentado las tasas de interés, lo que ha hecho que encarezcan todavía más los coches, lo que tampoco es una buena noticia para unos consumidores que deben hacer un pago mensual mayor en el caso de que adquieran financiado el vehículo.

     

    Todo esto son más dificultades para unos consumidores que ya han tenido que luchar todo el pasado año contra el aumento de la inflación. Cada vez la tasa de ahorro se ha reducido más, al igual que la confianza de los consumidores.

     

    En resumidas cuentas, los vehículos ahora son más caros y los compradores no están en el mejor momento para gastar el dinero que tienen. Todo ello puede terminar significando que se reduzcan las ventas, lo que haría disminuir las ganancias de Ford, pues las fábricas buscan producir la mayor cantidad de vehículos que sea posible.

     

    A corto plazo la situación parece difícil que pueda cambiar

     

    Los datos no son muy alentadores para los consumidores, por lo que es complicado ver que haya un gran movimiento de compra de vehículos en el corto plazo. Se espera una recesión en este año, y si eso sucede, es posible que tarden las compras en volver a su ritmo normal.

     

    El COVID-19 tuvo un papel importante como estímulo en el aumento de la inflación, pero no parece haya una inyección de dinero en los bolsillos de los potenciales compradores, la confianza y el crecimiento de la tasa de ahorro puede llevar cierto tiempo.

     

    La desaceleración del crecimiento puede estar al llegar

     

    Todo esto ha hecho que las expectativas de un crecimiento por parte de Ford no sean las mejores, al igual que para la mayoría de las empresas de coches.

     

    Está claro que el panorama puede cambiar de cara al futuro, pero la recesión que muchos expertos temen y esa reducción del gasto por parte del consumidor, lo lógico es que afecten al rendimiento en cifras de Ford.

     

    Aunque los inversores consideren las acciones como una potencial inversión a largo plazo, adquiriendo acciones de manera pausada en el tiempo, parece que es posible que las acciones languidezcan durante un tiempo.

     

    Esto hace que la mejor recomendación sea no adquirir acciones hasta que vuelva una tendencia alcista y que vuelva la seguridad a los compradores y unas señales evidentes de que los estadounidenses se encuentran en una posición en lo financiero firme y segura.

     

    ¿Y el estímulo del coche eléctrico?

     

    Son muchas las esperanzas que están puestas en las ventas de los coches eléctricos y en los movimientos que Ford está haciendo en su gama por la apuesta de este tipo de vehículos. 

     

    Lo cierto es que todavía muchos consumidores son reacios a su utilización, en especial por el tema de la autonomía, ni Tesla en este sentido se libra de ello.

     

    Aunque las autoridades, tanto norteamericanas como europeas, invitan a los ciudadanos a comprar vehículos movidos por energía eléctrica, todavía hay muchas incertidumbres que no invitan al optimismo, al menos a corto y medio plazo.

     

    Después de todo lo que os hemos contado, esperamos que tengáis una idea más certera a la pregunta que hacíamos sobre si era buena idea invertir en Ford para este 2023 en Nasdaq.

     

    Nuestro consejo es mirar en otras compañías, como en las eléctricas y de telecomunicaciones, que están en un mejor momento que las de automoción, que están sufriendo los vaivenes de la indecisión de los compradores a la hora de realizar ahora o dejar para mejores épocas la compra de un vehículo.