Finge que roban en su vivienda y le quitan 3.000 euros de la tarjeta
La Guardia Civil descubrió que la mujer había solicitado un préstamo con una entidad y pretendía que su banco sufragaran las cantidades que voluntariamente había retirado ella misma de diferentes establecimientos y cajeros de la Isla
La Guardia Civil ha investigado a una vecina, 37 años de edad, de Haría como presunta autora de un delito de simulación de delito, al fingir un hurto en su vivienda.
Las investigaciones comenzaron a raíz de la denuncia de la citada, que el pasado día 21 de septiembre denunció en la sede del mencionado Puesto Principal el presunto hurto, cometido en el interior de su vivienda, de una tarjeta de débito y el correspondiente número PIN o clave, desapareciendo seguidamente de su cuenta bancaria 2885 euros.
Sin embargo las pesquisas policiales desarrolladas por el área de Atención al Ciudadano del Puesto Principal de Costa Teguise permitieron reunir los indicios policiales necesarios para demostrar que fue una denuncia falsa, basados en varias incongruencias en lo manifestado en sede policial sobre su supuesta estancia en la Isla de Gran Canaria achacando vicisitudes médicas de un familiar cuando en realidad se encontraba en Lanzarote; además se comprobó que la denunciante había solicitado un préstamo de dinero con una entidad prestamista, por lo que denunciante presuntamente tenía intención de hacer que su banco sufragaran las cantidades que voluntariamente había retirado ella misma de diferentes establecimientos y cajeros de la Isla de Lanzarote.
La investigada ha quedado a disposición del correspondiente Juzgado, en funciones de guardia, de la localidad de Arrecife.
Penas por la simulación de delito
Cabe destacar que la simulación de un delito puede conllevar penas que van desde los 6 meses de hasta los 2 años de cárcel, o multas que irían desde los 3 hasta los 24 meses, dependiendo del nivel de gravedad del falso delito y de falsas imputaciones a terceras personas.
Este tipo de denuncias, además, causa un grave perjuicio a las unidades policiales que las reciben, puesto que motivan que se consuma una serie de recursos de personal, tiempo y material, afectando considerablemente al normal desarrollo de las investigaciones que se realizan por hechos reales.
