Anuncian que la "búsqueda activa" de los pescadores desaparecidos seguirá hasta este jueves

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Foto: Consorcio de Seguridad y Emergencias
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La “búsqueda activa” de Ramón Hernández Duchemín y Manolo Gutiérrez, los dos pescadores desaparecidos desde el sábado y cuyo barco naufragó, seguirá al menos hasta este jueves 22. Si ese día no hay novedades -como no las ha habido este miércoles, en la cuarta jornada del operativo-, se realizará una reunión para analizar los pasos a seguir, y lo más probable es que la búsqueda se reduzca y sea prácticamente pasiva. Así lo han anunciado este miércoles los máximos responsables del operativo, en una rueda de prensa ofrecida en la sede del Consorcio de Seguridad y Emergencias de Lanzarote.
“No sabemos qué ha podido pasar con los cuerpos, porque se pueden dar muchas posibilidades, desde que se hubieran hundido con el barco o que se hubieran golpeado y hubieran quedado a flote”, ha señalado Juan Machín, capitán del los Geas de la Guardia Civil, agregando que si fue esto último lo que ocurrió en la madrugada del sábado, durante todo ese tiempo los cuerpos estuvieron navegando y resulta casi imposible saber dónde pueden estar.
La búsqueda continúa ya sin la presencia de las unidades subacuáticas, aunque por mar y por aire se rastrea toda la zona sur de la isla hasta Fuerteventura, y también la isla majorera, y se espera que en breve, por causas físicas, si los cuerpos están en el fondo del mar salgan a flote.
El consejero de Seguridad y Emergencias del Cabildo, Sergio Machín, ha hecho una síntesis de lo ocurrido hasta ahora en torno a este caso. “La última llamada que consta, la que realizó Ramón a su pareja, fue en torno a las diez de la noche, diciéndole que regresarían muy pronto. La señora se extrañó al observar que de madrugada todavía no había regresado el marido pero sí el perro de la familia. Sobre las cuatro de la madrugada llamó a su marido y comprobó que el teléfono no estaba operativo”.
Fue en la mañana del domingo día 18 cuando la mujer notificó a la Policía Nacional la desaparición del marido, y estos a su vez dieron el aviso al Consorcio, que activó la búsqueda. El lunes día 19, personal de la Escuela de Pesca que realizaba unas prácticas subacuáticas localizó el barco de los pescadores, el “Popeye II”, hundido. “El barco presenta un golpe en la roda, posible causa del hundimiento al tropezar con el marisco cercano a la costa”, ha explicado Sergio Machín.