Un matrimonio vivió momentos de angustia al creer que su hija había sido raptada en una gasolinera

La niña, de 11 años, despareció cuando la pareja hacía compras en la Pecan de Valterra

. La gasolinera fue acordonada durante una hora. La chica apareció después en otra gasolinera

Carlos Serenelli
Foto: Kepa Herrero

Un matrimonio lanzaroteño vivió este pasado miércoles día 23 momentos de angustia y desesperación, al creer que su hija podía haber sido raptada, ya que repentinamente desapareció mientras estaba con ellos en una gasolinera. El temor duró afortunadamente sólo una hora, pero para la pareja habrán parecido meses, y lo bueno es que la historia terminó con final feliz, aunque quedan abiertos los interrogantes acerca de qué fue lo que realmente ocurrió.
Todo comenzó sobre las 20:30 horas de ese día, cuando el matrimonio, que se desplazaba en coche con su hija de 11 años por Arrecife, se detuvo para hacer unas compras en la gasolinera Pecan situada en la zona de Valterra, frente a las dependencias de Tráfico. Los tres ocupantes del vehículo se bajaron, y cuando el matrimonio terminó de pagar y se disponía a marcharse de la gasolinera, advirtió que su hija no estaba. Tras buscarla durante unos pocos minutos en este centro de servicios infructuosamente, dieron aviso a la policía.
Las fuerzas del orden acordonaron inmediatamente la gasolinera, impidiendo que nadie entrara ni saliera de la misma, como medida de precaución ante el posible hecho de que un supuesto raptor estuviera todavía por allí con la niña.
El acordonamiento duró aproximadamente una hora, ya que la chica fue localizada, pero en otro sitio, curiosamente otra gasolinera, la Shell que está en la zona de Las Rapaduras.
La menor fue hallada por una joven, que había estado antes en la gasolinera donde desapareció en el momento que se produjeron los hechos. Allí había escuchado la descripción de la chica, y por eso se percató de que podía ser ella cuando al pasar con su coche frente a la Shell, en dirección a Tahíche, vio una niña sola, que coincidía con las características físicas descritas. Dio entonces aviso a la policía, que inmediatamente llegó al lugar y constató que efectivamente, era la chica cuya desaparición había sido denunciada por sus padres.
La joven que la localizó relató a Lancelot Digital que “la niña estaba sola, en una esquina de la gasolinera, con los brazos cruzados; entonces di la vuelta con el coche y fui a la otra gasolinera, para avisarle a la policía, y después supe que en efecto, era la chica que estaban buscando”.
La incógnita es qué fue lo que realmente ocurrió, y la pregunta que queda flotando es si sólo fue una travesura, o si ocurrió algo más grave, como un intento de rapto.

Tercera hipótesis
Una tercera hipótesis fue planteada por una empleada de la gasolinera Pecan -donde supuestamente había desaparecido la niña-, que estaba trabajando cuando ocurrieron los hechos. Según relató esta empleada a Lancelot Digital, “los padres de la chica, antes de venir aquí, habían estado en la gasolinera de la Shell, porque querían comprar unos focos, pero estaban muy caros, y entonces vinieron a la Pecan. Y si la niña apareció en la Shell, es porque se bajó del coche sin que los padres se dieran cuenta”.
No obstante, esta misma empleada señaló que la madre de la niña “en todo momento decía que su hija desapareció en la Pecan”. Agregó que la mujer “estaba muy nerviosa, desesperada, y creía que era un secuestro”.

Sin versión policial
Lancelot Digital ha intentado durante todo este martes recabar la versión de la Policía Nacional, que fue la que intervino tras recibir la voz de alerta, pero fue imposible.
En la Comisaría de Arrecife el único autorizado a hablar es el comisario, según informan allí, pero cada vez que desde esta redacción llamamos telefónicamente, a lo largo de toda la mañana y toda la tarde, la respuesta fue la misma: “el comisario salió un momento”.
En tanto, en prensa de la Jefatura de Canarias, ni siquiera cogían el teléfono en este día semi-festivo de San Juan.