Una "guerra de ambulancias" podría ser el causante del incendio de una UVI móvil en Argana

La Policía trabaja para aclarar el hecho. La isla se queda con sólo dos vehículos de soporte vital avanzado
Lancelot Digital
Foto: Cedida por Diario de Avisos
Una ambulancia de Emermedical resultó calcinada en la calle Felo Monzón, en el barrio de Argana Alta el pasado fin de semana, frente a la vivienda de un trabajador de la empresa con cede en Tenerife, pero que desde hace 7 años opera en la isla de Lanzarote, según ha publicado el diario tinerfeño Diario de Avisos.
Aunque el cuerpo de bomberos todavía no ha expedido un informa oficial, los presentes no dudan en afirmar que el incendio de la UVI móvil fue intencionado y para ello se utilizaron acelerantes, presumiblemente gasolina.
Según informa este rotativo, el acto podría deberse a una “guerra de ambulancias” que ha degenerado hasta entrar en el terreno de lo delictivo. El caso ya se encuentra en manos de la Policía Científica los que investigan si este incendio intencionado está relacionado con las amenazas proferidas contra trabajadores de esta empresa por parte de los de una competidora, y que fueron denunciadas ante el juzgado de guardia el pasado día 4 de octubre. Según informa el diario tinerfeño, en las amenazas denunciadas destacan con claridad dos amenazas de muerte: “¡Te voy a mandar en una caja de pino a tu isla!” y “¡te voy a matar, no me quites mis clientes!”.
A este respecto, cabe recordar que el sector del transporte sanitario privado en Lanzarote vive días de agitación, al punto que esta misma semana una importante compañía aseguradora firmó con Emermedical para la realización de determinados servicios que anteriormente eran llevados a cabo por otra empresa, sumándose a otro trasvase que se produjo a principio del mes de octubre
Por su parte , un portavoz autorizado de Emermedical comentaba consternado a Diario de Avisos que “hay que ser muy malvado para incendiar una ambulancia que tantas vidas podía haber salvado”, valorando la pérdida del vehículo en unos 140 mil euros y eludiendo valorar la posibilidad de que el ataque responda a la acción de un competidor.
La destrucción de esta UVI móvil supone además un serio quebranto para las urgencias de la Isla, ya que la Isla se queda ahora con sólo dos vehículos de Soporte vital avanzado: el del SUC y el de otra empresa privada ajena a estos hechos.