Dolores Corujo, cazada en su propia trampa

- Lancelot Digital
Lo del PSOE radical en Lanzarote roza el ridículo. Tras pretender armar todo un escándalo contra Oswaldo Betancort porque algunos plenos ordinarios se han celebrado fuera de la fecha acordada, como el de la pasada semana, resulta que la mismísima Dolores Corujo fue, en su etapa como presidenta del Cabildo, la campeona del incumplimiento: se saltó 15 plenos y otros 25 los celebró fuera de fecha. La denuncia presentada por los socialistas en la Secretaría del Cabildo —y la amenaza de llevar a Betancort a los tribunales— solo ha servido para dejar al descubierto la doble vara de medir de Corujo.
Un historial para no presumir
Coalición Canaria no ha tardado en recordar el "historial" de la expresidenta. Pedro San Ginés, en una nota pública, denunció lo obvio: el cinismo de quien ahora pretende erigirse en guardiana del reglamento, cuando en la práctica fue la que más lo vulneró. No solo hurtó a la oposición 15 plenos enteros, sino que convirtió la celebración ordinaria en un trámite caprichoso, rompiendo con la regularidad que garantiza el control democrático. En definitiva, Dolores Corujo pasará a la historia del Cabildo no como la defensora de la legalidad, sino como la presidenta que menos plenos ordinarios convocó en tiempos modernos. Y ahora pretende dar lecciones. El tiro, como era de esperar, le salió por la culata.