¿Gobierna Yonathan de León para la foto o para los vecinos?

Las Fiestas de San Ginés de 2025 han superado las expectativas de la población insular. Eso es cierto. Lo que también es cierto es que, según los más críticos, quizá las hayan superado “de largo”. Tanto, que más de uno se pregunta si el alcalde de Arrecife, Yonathan de León, quiere convertir la ciudad en un parque temático de festejos a costa de todo lo demás. Los titulares de esta semana reflejan un malestar creciente y ponen sobre la mesa una duda incómoda: ¿están pesando más los fuegos artificiales que las necesidades reales? El gasto de casi 750.000 euros en el concierto de Alejandro Fernández —con un expediente aprobado el mismo día del evento y con la negativa de Intervención— o los 30.000 euros en una cena de gala para cerrar un torneo de fútbol, son un ejemplo de ese derroche alegre. En este último caso, el PSOE recalca que lo grave no es solo la cifra, sino que, mientras tanto, los clubes deportivos siguen sin cobrar las subvenciones del año pasado y sin noticias de la nueva convocatoria. Una contradicción difícil de digerir.

¿Hay hoja de ruta?

Pero el asunto va más allá de las facturas desorbitadas. El propio consejero del Grupo Mixto, Armando Santana, preguntaba con acierto en una columna: ¿quién controla a los que dicen controlar? Y lo hacía recordando un dato concreto: en apenas dos años de mandato, el Ayuntamiento de Arrecife ya acumula más de 1.100 reparos de la Intervención municipal. No hablamos de un tecnicismo aburrido: hablamos de un aviso rojo que el grupo de gobierno prefiere tratar como si fuera una mosca molesta. La duda es inevitable: ¿gobierna Yonathan de León para los vecinos o para la foto? ¿Existe una hoja de ruta o simplemente se improvisa según el capricho del día? Preguntas que, si no se responden pronto, terminarán devorando lo que queda de legislatura.