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Indignación en Canarias

 

 

 


La respuesta del Estado manifestando que no tiene instalaciones para poder acoger al millar de menores no acompañados que pide asilo en Canarias, alegando falta de medios, ha indignado a los mandatarios canarios. No se puede olvidar que las islas han asumido en soledad, y con sus propios medios, la acogida y manutención de estos jóvenes, y de otros 4.000 más, durante dos años. En Canarias, tras recurrir este problema en el Supremo y ganarlo, lo tienen muy claro: el Supremo considera que las competencias de aquellos menores que pidan asilo político es del Gobierno de España y no de las Comunidades Autónomas. Esperemos que cuando este periódico esté en la calle, el Estado rectifique y cumpla la voluntad del Supremo.

 


Unas lluvias inesperadas


La inesperada tromba de agua de unas dos horas de duración que cayó sobre Lanzarote en abril, especialmente desde la ladera de Montaña Blanca a Guatiza, causó numerosos destrozos en la isla. La zona de Costa Teguise fue la más dañada, hasta el punto de que, por primera vez en la historia de Lanzarote, tuvieron que desalojar varios hoteles, realojar a sus inquilinos y tres de ellos permanecen todavía cerrados por las inundaciones sufridas. También generó daños en Arrecife, como siempre, debido especialmente por las aguas que llegan de las zonas altas a las bajas. Un desastre.

 

 

Unas críticas poco acertadas

 

Lo cierto es que, a pesar de todo, hay que felicitar a los servicios de emergencias por su actuación porque, como a veces ocurre, la AEMET no pudo predecir que la lluvia fuera a caer en tal cantidad, ni en que lugares concretos iba a hacerlo, ni mucho menos la cantidad de agua que cayó. Llamó mucho la atención que el PSOE, en unos momentos en que la gente estaba todavía empapada y ofreciéndose para ayudar, sacara un duro comunicado criticando, de manera populista, la actuación de los alcaldes afectados. Lo absurdo es que el PSOE, que es uno de los partidos que más años ha gobernado en la isla, es parte del problema. Debería serlo de la solución. Más allá de que Arrecife necesita obras de pluviales, como las que ya han empezado a realizarse.

 

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