PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD

Luis Díaz Feria: “La gestión de la avenida es un rosario de despropósitos sin fin”

El arquitecto considera amortizado el debate y cree que es el momento de que sea contrastado con el voto de los ciudadanos en las próximas elecciones locales

 

  • Lancelot Digital
  • Begoña Chaves
  •  

     

    -¿Tiene solución la ciudad de Arrecife? ¿Cuáles serían las soluciones a corto y medio plazo?-¿Por qué se ha llegado a esta situación?

     -Tengo la impresión de que se tiende a magnificar la problemática de Arrecife. Diría que en Arrecife hay muchas cosas pendientes de hacer y que para alcanzar unos objetivos de calidad urbana razonables habrá que emplear más imaginación que presupuesto. Pero desde luego que hay soluciones y además no son muy difíciles ni costosas de implementar, en mi opinión.

    El Arrecife de hoy es el resultado de la llegada del turismo a Lanzarote. Remontémonos a 1970. Se diseñó un plan general como previsión para el futuro de la ciudad de entonces, plan que no acertó a imaginar en absoluto el papel que desempeñaría cada pieza territorial de la isla en el devenir turístico que se anunciaba. Y tampoco acertó, y este era su objetivo primordial, en servir de soporte al futuro de Arrecife. Aquel plan daba por hecho que los hoteles de la isla iban a estar ubicados en Arrecife, así como la vivienda necesaria para el previsible crecimiento de población, junto con todos los servicios urbanos y turísticos complementarios. 

    En realidad, tanto los hoteles como el resto de residencias y servicios relacionados con el turismo ‘saltaron’, con toda lógica,fuera de del término municipal hacia las playas del sureste, de tal forma que aquellas innovaciones que, en efecto, precisaba la ciudad se instalaron en otra parte fuera de los límites administrativos municipales. La vivienda se ubicó en Playa Honda y el turismo en Puerto del Carmen y Costa Teguise, incorporándose estos enclaves en buena medida a la vida ciudadana de Arrecife toda vez que ofrecían solución a los usos residenciales y de ocio que podía demandar la capital. Es preciso señalar que la mayor parte de esta implantación ex novo se llevó a cabo casi sin planeamiento, pero de forma razonablemente ordenada. Al menos con más orden físico y conceptual que muchos puntos del Arrecife tradicional.

    La expectativa de crecimiento, si bien no verificada, dio lugar a la clasificación como suelo urbano de muchos terrenos del término municipal de Arrecife, sin que hasta la fecha haya sido preciso disponer de esos suelos en más de un 50%. En ese proceso de planificación urbanística el casco antiguo se transformó hasta tal punto que resulta hoy casi irreconocible.

    Pensando Arrecife desde ahora hacia el futuro, creo que las estrategias a corto, medio y largo plazo pasan por sacudirse el enfoque depresivo con el que se aborda el ‘asunto Arrecife’, implicarse decididamente con la ciudad, dejar de lado las formulaciones testimoniales vacías de contenido, y pasar de inmediato a llevar a cabo acciones reales que tengan que ver con las necesidades y deseos de los ciudadanos.

    La prioridad absoluta estriba con claridad en gestionar proactivamente vivienda asequible dentro de la ciudad,en alquiler y en propiedad, comenzando por la rehabilitación del parque existente. El siguiente esfuerzo debe orientarse a poner en marcha una malla bien trabada de transporte público frecuente y de calidad que de servicio a todos los barrios. A partir de estas dos estrategias, lo demás se dará casi sin esfuerzo.

     

     

    -¿Considera que la falta de planeamiento es uno de los problemas? 

    -El problema importante es más bien el exceso de planeamiento, no su déficit. La supuesta necesidad de un plan general como solución a todos los problemas Arrecife es uno de los mantras recurrentes entre las filas políticas y entre técnicos del ramo. No comparto esa visión. Hace falta imaginación y trabajo. El planeamiento urbanístico tal y como se ha venido entendiendo en los últimos 50 años es una herramienta poco útil para generar cohesión social y vida urbana. Es innegable su utilidad como palanca financiera para el negocio inmobiliario en la medida en que puede anticipar información privilegiada, pero ha resultado ser en general un impedimento muy serio para la gestión tanto de vivienda asequible como de equipamientos públicos en las ciudades, no sólo en Arrecife.

    En realidad, Arrecife no necesita un nuevo plan general. La mitad del suelo urbano consolidado actual está vacante y apto para recibir prácticamente cualquier uso. Más que planeamiento, se precisan, en cambio, iniciativas y acciones insistentes, que además coincidan en el tiempo, aunque puedan parecer descoordinadas para la mirada corta administrativa. La ciudad es esencialmente acumulación de actividad y la constante pérdida de actividad en todos los órdenes es precisamente el rasgo que identifica hoy a Arrecife, en franca contraposición con lo que ocurre en el resto de Lanzarote.

     

     

    -El crecimiento en altura, ¿sería una opción? 

    -En absoluto, más bien al contrario, tomado como medida generalizada sería contraproducente. Lo que no quiere decir que en algunas zonas de cada barrio sí sea oportuno incrementar puntualmente la densidad de forma moderada para conseguir una mínima complejidad de escenarios y la dimensión poblacional suficiente para generar vida urbana. En estos casos, y dada la endémica escasez de suelo público, la autorización de mayores alturas pudiera ser una opción beneficiosa.Arrecife, como cualquier otra entidad urbana,necesita gestionarse en base a un concepto adaptativo de su espacio, particularmente de su espacio público. 

     

    -¿Cómo debería ser la capital de Lanzarote? 

    -Si nos preguntamos sobre la capitalidad futura de Lanzarote, hay que señalar que Arrecife ha sido capital de Lanzarote durante los últimos doscientos años, periodo en el que la división administrativa insular en siete municipios ha coincidido razonablemente con la distribución física de las poblaciones reales, así como con los usos y hábitos que estas han propuesto.

    Hoy ya no es así. Arrecife necesita se encuentra integradoen una estructura urbana nueva en la que otros núcleos de menor tamaño ya han hecho acto de presencia por su vinculación directa o indirecta con la industria turística. El reto es, pues, proyectar el perfeccionamiento de una conurbación que ya funciona como realidad urbana capitalina, como capital de facto, a lo largo de 25 kilómetros de costa, desde Puerto del Carmen hasta Costa Teguise. Para la dignificación de lo que entendemos como casco urbano de Arrecife, este es un desafío urgente a cinco o diez años vista que implica una revisión del modelo de reparto administrativo del territorio insular.

    Si la pregunta, en cambio, se refiere a cómo entiendo el futuro del Arrecife histórico, con todos sus barrios incluidos, diría que Arrecife debe ser exactamente como ya es hoy, potenciando sus vacíos urbanos y colmatando el suelo disponible al ritmo que precise la vida de la ciudad. Me permito una autocita extraída de Teoría de Arrecife I: “Arrecife es una ciudad hermosa. Lo es por la excelente sintaxis de sus espacios…” Y por su capacidad de resiliencia, añadiría.

    Las posturas de tendencia ‘cuqui’ están apostando con fuerza para que también Arrecife se transforme en un simulacro de ciudad para el consumo turístico. Espero que no sea así. No creo que Arrecife necesite mucho más que un cambio en la actitud de sus ciudadanos. Arrecife es una de las poblaciones con más personalidad y alma de las que históricamente definen Lanzarote. Necesita ser leída y escuchada con afecto.

     

    -¿Piensa que la solución que ha dado el Ayuntamiento al problema de la avenida es la correcta? ¿Se conseguirá aumentar el número de paseantes y darle vida a la zona de esta manera? 

    -Ciertamente el relato de la gestión de la avenida se ha convertido en un rosario de despropósitos que todavía no tiene fin. Es un asunto que resulta controvertido para un importante sector de la población que, aun conociendo los aspectos positivos de la iniciativa, se siente extrañada hacia este espacio singular tal y como se formula hoy. Creo que el debate sobre la reforma de la avenida está amortizado con suficientes opiniones, expresivas de todas las sensibilidades posibles. Es hora de que sea contrastado con el voto de los ciudadanos en las próximas elecciones locales.

     

    Comentarios (5)