Los okupas rompen de nuevo el candado de la vivienda de la casa de los Becerra
La policía se ha personado con representantes de la propiedad
Poco duro la tranquilidad. Si la semana pasada los propietarios se vieron obligados a arreglar la cerradura rota, ahora los okupas de la zona del entorno de la Iglesia de San Ginés, en Arrecife, han vuelto a romper el candado de la puerta para poder entrar.
Esta mañana, personal de la Policía junto a representantes de la propiedad, la familia Becerra, fueron a revisar la casa e intentar buscar una solución a esa violación de la propiedad privada.
Por el momento, se están realizando investigaciones pero aún no se sabe si se ha producido algún tipo de detención o interrogatorio a posibles sospechosos entre los "sintecho".
La propiedad está harta de los continuos intentos de violentar la puerta y ventanas de esa casa deshabitada, propiedad de los herederos del conocido comerciante Antonio Becerra, ya fallecido. Se trata de la casa número cinco de la calle Aquilino Fernández, vivienda que en su día fue de la abuela materna del que fuera Presidente del Cabildo, Juan Carlos Becerra.
